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Escrito por Cronos el lunes, 21 de septiembre de 2009

Lo decía extremoduro... me gustaría sonreir, pero no quedan tantas drogas hoy aqui...

No es cuestion de drogas. Bueno, cualquiera que haya leido las letras de Roberto Iniesta en profundidad ya debería saber que rara vez cuando habla de droga habla únicamente de droga (a veces si). Está aquello de "necesito drogas y amor", bastante evidente de por si (el amor es la droga mas dura, decían los platero), pero tambien establece metaforas muy similares con la libertad, aunque estas a veces son un poco más difíciles de pillar.

Bueno, esto no pretende ser un ejercicio de Extremodurología. Solo estaba apoyándome un poco en sus letras para contar lo que quiero/me apetece/necesito contar.

Círculos viciosos. O espirales maliciosas. Viene a ser lo mismo. La soledad (que últimamente me pesa y mucho) me afecta al ánimo. El ánimo me afecta a la soledad - o sea, que me es muy dificil establecer relaciones personales con nadie cuando estoy en fase de auto-no-aceptación... y por lo tanto la soledad se eterniza. En ocasiones por mis propias barreras absurdas (que yo mismo sé que son absurdas) a la hora de relacionarme con "aquellas personas de entre los demás que percibo como posible compañía sexual o sentimental" hacen que pasen trenes simplemente porque no he ni hecho el ademán de pillarlos. Soy consciente de que estas cosas son parte de uno mismo, pero tambien soy consciente de que es un poco absurdo quejarme de la soledad y a la vez no ser capaz de acercarme a alguien que me resulta atractivo por el simple hecho de que me resulta atractivo. Timidez, le llaman, y es un poco hijaputa, y se me acentua cuando el animo anda bajo. Lo dicho, la pescadilla que se muerde la cola. Y se hace sangre, además.

Conclusiones:
Pues va a tocar comprarse una buena coleccion de caretas.

Bueno, no deja de ser una declaracion de intenciones, claro. Quien me conoce sabe que me es prácticamente imposible ocultar mi estado de ánimo enun 99% de las ocasiones. Y cuando lo hago, tiene que ser muy a sabiendas y con un objetivo muy claro. Solo se actuar como quien juega a rol: Metiéndome en un papel. Y además el papel tiene que ser plausible, creible. Si no, en seguida regreso al "yomismo".

Por ejemplo, suelo "disfrazarme" bastante en los trabajos. Incluso a veces con mi familia. No es que me transforme en otro, simplemente se que hay facetas de mi mismo que es mejor que no conozcan a fondo, no porque me averguence de ella, sino porque simplemente se que es sumamente improbable que las comprendan o simplemente las intenten comprender.

Siempre considere que entre mis amigos, mi entorno, mi gente podía ser yo mismo al 100%, ignorar las barreras. La experiencia me dice que no tanto como yo pensaba (aunque si mucho, conste, esto no es ningun tipo de recriminacion, solo la constatacion de un hecho... y se que escribirlo puede hacerlo sonar mas a recriminacion todavia, pero no, no lo es, si hay alguien a quien deba recriminarle algo es a mi mismo, y no es el caso, o no mucho, no estoy flagelándome). Asi que, eso, me compraré una coleccion de caretas, pondre la sonrisa de la ballena y seguiré tirando para adelante. En realidad, no queda otra opción. Bueno, si, pero las otras me gustan menos. Los problemas se resuelven, darles vueltas solo sirve para agravarlos, y ultimamente he dado demasiadas vueltas, y he tomado demasiadas pocas decisiones. Habrá que intentar cambiarlo... De hecho, esta simple pequeña decision, aunque no deje de ser una declaracion de intenciones, es un cambio en si mismo. Pasar pagina, enterrar los muertos, y seguir.

La sonrisa de la ballena

Con sonrisa de ballena,
con veneno por las venas
voy dejandome llevar...

Entregandome al fracaso
hasta el fondo de mil vasos
lograré bucear...

Entre luces de colores,
me cago en todas las flores,
se miran sin observar...

Si descubro una sirena
¡insurgencia en las colmenas!
con la puta ansiedad...

Corro siempre huyendo hacia delante
delicao cuan elefante,
elegante cuan chacal...
Corre, que voy buscando la cena
con sonrisa de ballena
y tinta de calamar...
pa cuando huele a final...

Mi disfraz de vagabundo
da mil vueltas por el mundo
cuando quiero despegar

Y me cuenta mil historias
de veletas y de norias
y de un salto mortal...

Con el traje de payaso
tampoco me hacen ni caso
pero no lo tomo a mal...

Y si a veces cuento el tiempo
aun me sorprende el aliento
de la calva detras...

Corro siempre huyendo hacia delante
delicao cuan elefante,
elegante cuan chacal...
Corre, que voy buscando la cena
con sonrisa de ballena
y tinta de calamar...
pa cuando huele a final...

Y harta de pensar en venas,
sonrio la ballena,
guiñando al chacal...

Y harta de tanto elefante,
huyó hacia delante
y aprendio a volar...

Y harta de cargar con penas
voló la ballena
mas allá del mar

Y harta de ser navegante,
se volvio elefante
y dejo todo atras...
y sonrio hasta el final...

Las ballenas sonrien para alimentarse. Llenan su boca de agua con Krill, y despues la expulsan, filtrandola con su dentadura, y dejando al Krill dentro... Habrá que sonreir, pues. O por lo menos intentarlo.

(las muy proximas vacaciones ayudarán, espero xD)

Escrito por Cronos el martes, 1 de septiembre de 2009

Necesito cometer una necedad.

Todos tenemos necesidades. Un tal Maslow expuso unan teoría con una hermosa pirámide en la que describía (o pretendía describir) como los seres humanos tenemos necesidades (obvio) y como tendemos a priorizarlas. No me lo se de memoria (la wiki ayuda), aunque la teoría me haga cierta gracia, pero basicamente la piramide famosa dividía las necesidades en tipos, y venía a establecer prioridades según dichos tipos. Por supuesto, la propuesta aunque probablemente sea real y creible cuando se trata a un colectivo como un todo, deja de ser cierta cuando nos tomamos uno por uno. Describe una tendencia generalizada y no una realidad necesariamente cierta para todos y cada uno. Habitual en las ciencias sociales, claro.

Pues bien, se supone que primero tendemos a cubrir nuestras necesidades primarias o fisiologicas. O sea, aquello que necesitamos para seguir viviendo. Comida, agua, aire, descanso... y sexo.

Despues vienen las necesidades de seguridad y proteccion. O sea, aquello que hace que padezcamos menos miedo. Garantías de que las necesidades fisiologicas vayan a seguir estando cubiertas.

Es curioso, el sexo aparece de nuevo en el siguiente nivel... Necesidades afectivas. Aunque aparece ya vinculado a la emocion, al afecto.

Por encima aparecen necesidades sociales y de autorealizacion... que se salen un poco de lo que quiero expresar.

En realidad, en las ultimas semanas he cumplido bastantes necesidades de "nivel alto". Socialmente he vuelto al menos, a intentar -y conseguir por no poco tiempo- sentirme integrado en mi entorno (con las dificultades que para esto ciertos hechos conllevaron). El concierto de la semana pasada -y los ensayos necesarios- ha contribuido enormemente a mi sensacion de autorealizacion (autoaceptacion?). Tambien han surgido proyectos para hacer cosas, y ganas hay. Aunque paso por malos momentos en lo economico, son muy relativos, sigo teniendo un techo, comida, los vicios mas o menos cubiertos, y la pasta necesaria para cubrir mis actividades de ocio... Y todo indica que va a continuar siendo asi, o incluso que las cosas mejoraran en un plazo no demasiado lejano.

Joder, Maslow, debería ser feliz, o casi. Peeeeeero... Tengo una necesidad fisiologica y una afectiva sin cubrir. Y asi, malamente. Claro, son de nivel bajo. Es lo que tiene.

Ahora va la necedad, que no está en lo que digo, si no en el hecho de decirlo (vaya, no deja de ser una forma de tirar piedras contra el propio tejado...):

Necesito echar un polvo.


Sin infantiladas, sin chorradas, sin dimes y diretes, sin remordimientos, sin estreses.
Una dosis de endorfinas en vena.
Calor humano. Cercanía. Un poco de cariño aunque sea simulado o efecto secundario de la expectativa de placer, o consecuencia del placer mismo. Acompañado de respeto y atencion mutuos, aunque sin aspavientos, sin todo eso que asociamos al amor o el enamoramiento (que si se da, y es mutuo, bienvenido sea, pero vamos, que no es necesario para cubrir lo fundamental de mi carencia).

Simplemente, un yo quiero, tu quieres, hagámoslo. Disfrutemos.

Sentirme aceptado, y por ello aceptable. Apto.

Creo que es la primera vez que escribo algo asi en positivo. Normalmente lo hacía por suplementariedad, o sea, me quejaba de no conseguir en lugar de exponer que necesitaba. No dejan de ser las dos caras de la misma moneda... Y no deja de demostrar mi tendencia a la tragedia y la lamentacion... Bueno, pues esta vez paso de lamentarme. Y a pesar de ello digo mas o menos lo mismo.

Lo más extraño es que ahora mismo pienso que todo lo que acabo de escribir es mucho mas... ¿profundo? de lo que pensaba cuando empece a escribirlo. Quizá tenga que poner mas veces en práctica este cambio de tactica (exponer en lugar de lamentar). Xa veremos.


Ah, por cierto... Maslow, me cago en tus muertos. De buen rollo eh. ;)