Escrito por Cronos el jueves, 30 de septiembre de 2010
Imaginemos que un dia se "inventa" un artilugio que, en el interior de un balon de futbol, (por ejemplo) permita, mediante el uso de algun tipo de transmisor, controlar su trayectoria.
Supongamos que los proceres del futbol deciden adoptar este aparato y repartir a cada aficionado un mando mediante el cual, entre todos, se decidirá la trayectoria de la pelota en cada partido oficial.
Supongamos que los mandos repartidos sean en realidad una trampa, que simplemente sean ignorados o tengan una prioridad infinitamente menor que ciertos otros mandos y que sean una serie de directivos televisivos y de los clubes los que posean en realidad los mandos que controlan la pelota.
¿Cual sería la percepcion de la mayoría? Creerian que han afectado al resultado de cada partido por haber estado pulsando su mando falso. En cierto modo, se creerian parcialmente responsables de ese resultado, incluso cuando el equipo al que pretendian beneficiar no hubiese obtenido el resultado deseado. Fue culpa "nuestra", no nos esforzamos lo suficiente.
¿Y cual sería la realidad? Que el resultado del partido unicamente habría sido decidido por unos pocos que, velando por sus intereses, serían los que realmente tendrían el control de lo sucedido.
Pues bien, la democracia representativa es exactamente igual que ese mando. Por mucho que la mayoría queramos empujar la pelota en una direccion mediante el voto, la realidad es que ciertos directivos y ciertos medios son los que tienen los mandos "de verdad", y manejan los gobiernos y la legislacion a su antojo, impulsando e imponiendo medidas que la mayoria rechazamos. Eso si, revestidas de "legitimidad democrática". Ellos solo hacen "lo que hay que hacer", pero a traves del sistema de control remoto que nos han dado a cada uno (el voto), nos hacen participes de la decision como si nosotros mismos la hubiesemos tomado.
Los politicos profesionales no tienen como objetivo contentar lo maximo posible a sus votantes. Solo tienen como objetivo ganar las siguientes elecciones para no perder la silla. Podría parecer lo mismo, pero no, no lo es. Los politicos profesionales no se comprometen con lo que anuncian que haran en campaña - "las circunstancias" pueden con todo, claro. En realidad, la democracia representativa no deja de ser una dictadura en la que es posible cambiar al dictador periodicamente. Y consecuencia inmediata de ello es que toda decision tomada bajo ese sistema politico, por muy revestida que este de "legitimidad democratica" no deja de ser decision de los politicos profesionales, o mas bien de los que controlan a los politicos profesionales desde la sombra, y por lo tanto, muy dificilmente achacable a los que les han votado. No son "nuestras" decisiones. Son las suyas. Son ellos los que manejan realmente la pelota.
La proxima vez que te (nos) convoquen a votar quiza recuerdes esto si ves el mando de la play.
Supongamos que los proceres del futbol deciden adoptar este aparato y repartir a cada aficionado un mando mediante el cual, entre todos, se decidirá la trayectoria de la pelota en cada partido oficial.
Supongamos que los mandos repartidos sean en realidad una trampa, que simplemente sean ignorados o tengan una prioridad infinitamente menor que ciertos otros mandos y que sean una serie de directivos televisivos y de los clubes los que posean en realidad los mandos que controlan la pelota.
¿Cual sería la percepcion de la mayoría? Creerian que han afectado al resultado de cada partido por haber estado pulsando su mando falso. En cierto modo, se creerian parcialmente responsables de ese resultado, incluso cuando el equipo al que pretendian beneficiar no hubiese obtenido el resultado deseado. Fue culpa "nuestra", no nos esforzamos lo suficiente.
¿Y cual sería la realidad? Que el resultado del partido unicamente habría sido decidido por unos pocos que, velando por sus intereses, serían los que realmente tendrían el control de lo sucedido.
Pues bien, la democracia representativa es exactamente igual que ese mando. Por mucho que la mayoría queramos empujar la pelota en una direccion mediante el voto, la realidad es que ciertos directivos y ciertos medios son los que tienen los mandos "de verdad", y manejan los gobiernos y la legislacion a su antojo, impulsando e imponiendo medidas que la mayoria rechazamos. Eso si, revestidas de "legitimidad democrática". Ellos solo hacen "lo que hay que hacer", pero a traves del sistema de control remoto que nos han dado a cada uno (el voto), nos hacen participes de la decision como si nosotros mismos la hubiesemos tomado.
Los politicos profesionales no tienen como objetivo contentar lo maximo posible a sus votantes. Solo tienen como objetivo ganar las siguientes elecciones para no perder la silla. Podría parecer lo mismo, pero no, no lo es. Los politicos profesionales no se comprometen con lo que anuncian que haran en campaña - "las circunstancias" pueden con todo, claro. En realidad, la democracia representativa no deja de ser una dictadura en la que es posible cambiar al dictador periodicamente. Y consecuencia inmediata de ello es que toda decision tomada bajo ese sistema politico, por muy revestida que este de "legitimidad democratica" no deja de ser decision de los politicos profesionales, o mas bien de los que controlan a los politicos profesionales desde la sombra, y por lo tanto, muy dificilmente achacable a los que les han votado. No son "nuestras" decisiones. Son las suyas. Son ellos los que manejan realmente la pelota.
La proxima vez que te (nos) convoquen a votar quiza recuerdes esto si ves el mando de la play.
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