Los trabajadores de la empresa Rioglass Astur, ubicada en el polígono industrial mierense de Sovilla, aprobaron ayer mediante votación la aplicación del Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que, finalmente, afectará a 110 trabajadores y que irá destinado a la totalidad de la plantilla, desde los operarios hasta los directivos, dejando fuera a empleados que ya hayan sufrido otros expedientes anteriores. Con esta decisión, que fue ratificada por un 88 por ciento de los votos, esta medida comenzará a desarrollarse desde el próximo día 6 de abril y hasta el 31 de diciembre del presente ejercicio. De esta manera, el colectivo de trabajadores ha respaldado la postura del SOMA-FIA-UGT, que había pedido ya el miércoles, tras varias horas de negociaciones, el voto afirmativo en la consulta democrática después de que la empresa mejorara el contenido del ERE y retirara la propuesta de despidos. Cuestiones que han sido fundamentales a la hora de llegar a un acuerdo en la aplicación de este expediente de regulación de empleo que llega en plena crisis del sector del automóvil y auxiliares.

CONTROL Y SEGUIMIENTO Tras este amplio apoyo a la aplicación inmediata del ERE, desde el SOMA se anunció ayer "un firme control y seguimiento del compromiso establecido" así como de la elaboración del plan industrial y de viabilidad que tiene previsto analizar con la dirección de la empresa y la consejería de Industria. Desde el sindicato se pidió también un plan de formación para que los trabajadores se puedan acogerse voluntariamente durante este periodo para mejorar su cualificación y se criticó la postura defendida en los últimos días por CCOO de rechazo al ERE, al considerar que se están firmando en la actualidad otros expedientes que incluyen peores condiciones que éste.

Lo que está claro es que el expediente de regulación de empleo de Rioglass Astur es ya una realidad a pesar de tratarse de una compañía, tal como reconoció el SOMA, que se ha convertido en un referente creando importantes expectativas desde el punto de vista de la diversificación, la generación de empleo y el desarrollo territorial de las comarcas mineras. De hecho, el sindicato dejó claro su rechazo a la posibilidad de que las firmas estén utilizando la crisis coyuntural para aplicar medidas estructurales y apostó por impulsar nuevas medidas y actuaciones que garanticen el futuro de esta empresa que atraviesa una mala época.