Escrito por ObservatoriuLlaboral el xueves, 26 abril de 2007
Los miembros de la brigada de Salvamento Minero de Hunosa estarán en disposición de comenzar a investigar las causas del incendio del pozo María Luisa en unos días, probablemente la próxima semana. A medida que han ido avanzando los trabajos de confinamiento del fuego -que Hunosa dio por extinguido anteayer- los mineros de elite han ido elaborando un informe respecto a los indicios y las situaciones con las que se han ido encontrando. Unas labores que, según confirmaron a EL COMERCIO los propios profesionales, no han aportado datos significativos.
Con las llamas «totalmente controladas» desde el jueves, ahora la máxima prioridad es dar definitivamente por extinguido el fuego, para dejar paso a la valoración de daños y a la averiguación de las causas. Los trabajadores de Salvamento Minero esperan en-trar en la zona confinada a finales de esta misma semana y eliminar posibles rescoldos, lo que permitirá iniciar la investigación.
Este informe de Hunosa pretende esclarecer las causas del fatal incendio, que provocó una nube tóxica que afectó a 184 personas y forzó el desalojo de otras 700. Por lo tanto, cobra especial importancia tanto para la propia hullera como para los vecinos, muchos de los cuales ya han iniciado el procedimiento para reclamar daños y perjuicios. Asimismo, los sindicatos mineros se han mostrado desde el primer momento como los más interesados en conocer las causas del incendio y esperan que la empresa les facilite un informe muy detallado sobre el accidente y todas las actuaciones que se han realizado.
Entretanto, los trabajos en las entrañas del pozo María Luisa se desarrollaron ayer con la tranquilidad que da saber que el fuego está concentrado en un reducto muy pequeño en el que no se detectan focos de calor, según pudieron confirmar los propios brigadistas tras realizar labores de vigilancia en la zona confinada. Esperan ejecutar en las próximas horas un nuevo tabique para seguir cercando la zona y bombear la zona inundada en las primeras horas del siniestro, en la que el agua alcanza cerca de dos metros de altura.
La empresa pública también confía en iniciar en breve la restauración del plano de Modesta y de la cinta que transporta el carbón desde los pozos de María Luisa y Sotón al lavadero. Unos trabajos que se harán con rapidez, ya que Hunosa pretende que los 300 mineros del pozo María Luisa afectados por la regulación de empleo puedan volver al tajo durante la primera quincena del mes de mayo y conseguir alcanzar entre un 60 y un 70% de la producción de la mina antes del accidente.
Con las llamas «totalmente controladas» desde el jueves, ahora la máxima prioridad es dar definitivamente por extinguido el fuego, para dejar paso a la valoración de daños y a la averiguación de las causas. Los trabajadores de Salvamento Minero esperan en-trar en la zona confinada a finales de esta misma semana y eliminar posibles rescoldos, lo que permitirá iniciar la investigación.
Este informe de Hunosa pretende esclarecer las causas del fatal incendio, que provocó una nube tóxica que afectó a 184 personas y forzó el desalojo de otras 700. Por lo tanto, cobra especial importancia tanto para la propia hullera como para los vecinos, muchos de los cuales ya han iniciado el procedimiento para reclamar daños y perjuicios. Asimismo, los sindicatos mineros se han mostrado desde el primer momento como los más interesados en conocer las causas del incendio y esperan que la empresa les facilite un informe muy detallado sobre el accidente y todas las actuaciones que se han realizado.
Entretanto, los trabajos en las entrañas del pozo María Luisa se desarrollaron ayer con la tranquilidad que da saber que el fuego está concentrado en un reducto muy pequeño en el que no se detectan focos de calor, según pudieron confirmar los propios brigadistas tras realizar labores de vigilancia en la zona confinada. Esperan ejecutar en las próximas horas un nuevo tabique para seguir cercando la zona y bombear la zona inundada en las primeras horas del siniestro, en la que el agua alcanza cerca de dos metros de altura.
La empresa pública también confía en iniciar en breve la restauración del plano de Modesta y de la cinta que transporta el carbón desde los pozos de María Luisa y Sotón al lavadero. Unos trabajos que se harán con rapidez, ya que Hunosa pretende que los 300 mineros del pozo María Luisa afectados por la regulación de empleo puedan volver al tajo durante la primera quincena del mes de mayo y conseguir alcanzar entre un 60 y un 70% de la producción de la mina antes del accidente.
21 Comentarios